La biofábrica de Ence en Navia ha completado recientemente el proceso de auditoría del esquema de verificación Sure, que garantiza la sostenibilidad del proceso productivo a partir de fuentes de biomasa sostenibles, que también son evaluadas. Se trata de biomasa de proximidad consistente principalmente en restos vegetales de origen forestal, derivados del aprovechamiento sostenible de las masas forestales y de la producción de celulosa en las mismas instalaciones.
El desarrollo de las auditorías de certificación se llevó a cabo con éxito y contó con el reconocimiento del certificador. Con la finalización del proceso de verificación de los requerimientos del estándar, la planta naviega pasa a formar parte del selecto grupo de instalaciones certificadas por el esquema Sure en Europa, y se convierte en la primera de Asturias en contar con este sello.
La biofábrica de Navia continúa de esta manera con el proceso iniciado en el mes de julio por la planta de generación con biomasa de Ence en Mérida y la biofábrica de la compañía en Pontevedra, y continuado, más recientemente, por las plantas de la compañía en Ciudad Real y Jaén. Esta apuesta por la certificación ha convertido a Ence en la primera empresa del continente en iniciar el proceso de verificación de la sostenibilidad de su biomasa mediante este estándar.
CEGANOR ha sido la entidad responsable de auditar el proceso, ya que se trata de la única empresa española reconocida y autorizada por el esquema Sure para realizar este servicio. Esta certificación es una de las herramientas desarrolladas para asegurar el cumplimiento de las exigencias de la Directiva de Energías Renovables (UE) 2018/2001 (REDII), normativa europea que establece los criterios que deben cumplir todaslas biomasas empleadas en el sector de la bioenergía, enfocados a garantizar su sostenibilidad, un correcto balance de masas, la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero y la eficiencia energética.
Ence da así un paso más en el impulso a la certificación de todas sus plantas de producción energética a partir de biomasa, proceso cuya finalización espera lograr al término de este segundo semestre del año, cuando se hayan completado las auditorías en el resto de plantas de generación de energía renovable, adelantándose en cinco meses a los plazos previstos en la normativa estatal.